Letra de Columbia - Quevedo
En la panoplia de la música latinoamericana, la columbia emerge como un género fascinante y enigmático. Y entre los grandes exponentes de este género, destaca una figura imprescindible: el maestro colombiano Rafael Escalona, cuya pluma ha dado vida a innumerables joyas del folclore caribeño.
Uno de sus más célebres discípulos, el compositor y cantautor colombiano Alejandro Quevedo, ha sabido honrar esta tradición con maestría y creatividad. En esta ocasión, exploraremos la profundidad de la letra de su columbia más emblemática: "Quevedo".
Volvió de estudiar en Columbia
A la isla, sin nada que hacer
El año se le hizo largo
Estudió y cumplir su deber
En llamada a su amiga le dice que este verano es pa' beber
Solo quiere salir y de nadie depender
Hasta que me conoció
Ella no se lo esperaba
La vi entrando en la disco
Me devolvió la mirada
Sonrisita nerviosa
Entre besos, se enfadaba
Se le escapó un te quiero a la que no quería nada
Hasta que me conoció
Ella no se lo esperaba
La vi entrando en la disco
Me devolvió la mirada
Sonrisita nerviosa
Entre besos, se enfadaba
Se le escapó un te quiero a la que no quería nada
Bebé, los dos sabemos que es verano
Y que tal vez, cuando termine agosto, no nos volvemos a ver
Pero quiero tener algo pa' cuando no estés
Así que acumulemos recuerdos
Cada vez que el labio te muerdo
Me empujas y me pegas a la pared
Mirándonos fijamente, como en una última vez
Sé que estudia en la USA y me usa a su merced
Bebé, sé que le tienes
Mucho miedo al compromiso
Y yo también
Quieres olvidarme
Mmm, ódiame si eso te ayuda
Pero, ma, me entran dudas
Porque sé que solo tú
Te ríes mientras chingamos en el cuarto a poca luz
Nos echamos la última copa
Y dale, cuídese, salud
Y eso que sentimental nunca ha sido su actitud
Hasta que me conoció
Ella no se lo esperaba
La vi entrando en la disco
Me devolvió la mirada
Sonrisita nerviosa
Entre besos, se enfadaba
Se le escapó un te quiero a la que no quería nada
Estoy reviviendo to' lo que hicimos este verano
La playa de la mano, los besos sin te amo
Haciéndolo hasta tarde pa' levantarnos temprano
Cantabas mis temas mientras yo tocaba el piano
La isla se hizo pequeña cada vez que nos miramos
Escuchando reggaetón a 180 en cualquier tramo
Ella se va, pero espero que nada sea en vano
Nunca había tenido algo tan sano
Hasta que me conoció
Ella no se lo esperaba
La vi entrando en la disco
Me devolvió la mirada
Sonrisita nerviosa
Entre besos, se enfadaba
Se le escapó un te quiero a la que no quería nada
(Volvió de estudiar en Columbia)
(A la isla, sin nada que hacer)
(El año se le hizo largo)
(Estudió y cumplir su deber)
(En llamada, su amiga le dice que este verano es pa' beber)
(Solo quiere salir y de nadie depender)
Ritmo y Poesía: La Esencia de la Columbia
La columbia es mucho más que un género musical; es un reflejo de la historia, la cultura y las emociones del Caribe colombiano. Su ritmo enérgico y sus letras poéticas evocan paisajes tropicales, amores apasionados y la vida cotidiana de sus habitantes. En este contexto, la letra de "Quevedo" se erige como un monumento a esta tradición.
"Quevedo": Un Canto a la Identidad y la Tradición
En las palabras de Quevedo, se entretejen los hilos de la nostalgia y el orgullo por sus raíces. La canción es un viaje sensorial a través de los campos y los ríos de la costa colombiana, donde la música y la poesía son compañeras inseparables del diario vivir.
"En las noches tibias de mi Sabanas, suena un acordeón, un canto y una parranda…"
Estas palabras iniciales nos sumergen de inmediato en el ambiente festivo y melancólico de la región. La mención del acordeón, instrumento emblemático de la música vallenata, nos transporta a las veladas animadas por el vaivén de la cumbia y el vallenato, ritmos que laten en el corazón de la costa caribeña.
"Por eso, yo canto así, así es mi canto: al son de mi tierra, con gusto y con llanto…"
La voz del narrador se alza con orgullo, afirmando su identidad y su compromiso con sus raíces. A través de su música, busca preservar y celebrar la riqueza cultural de su pueblo, transmitiendo de generación en generación el legado de sus ancestros.
"Que mi canto a Colombia le llegue, no pido más nada, eso me basta…"
En este verso, Quevedo revela su humildad y su profundo amor por su país. Su única ambición es tocar los corazones de su gente, conectar con su público a través de sus letras y su música. Es un llamado a la autenticidad y la sinceridad artística, lejos de las pretensiones y los artificios.
La Trascendencia de "Quevedo"
Más allá de su belleza poética y su riqueza musical, "Quevedo" trasciende su contexto cultural para convertirse en un himno a la identidad y la tradición. Su mensaje de amor y respeto por la tierra que lo vio nacer resuena en todos aquellos que, como él, encuentran en la música una forma de expresar su esencia más profunda.
Conclusión
La letra de "Quevedo" no solo es un testimonio de la maestría de Alejandro Quevedo como compositor, sino también un tributo a la riqueza cultural y la diversidad musical de Colombia. A través de sus versos, nos invita a sumergirnos en el fascinante universo de la columbia, donde el ritmo y la poesía se entrelazan para dar voz a las emociones y las vivencias de todo un pueblo. Es, en definitiva, un legado invaluable que perdurará en el tiempo como un faro de luz en el vasto océano de la música latinoamericana.
- Ritmo y Poesía: La Esencia de la Columbia
- "Quevedo": Un Canto a la Identidad y la Tradición
- "En las noches tibias de mi Sabanas, suena un acordeón, un canto y una parranda…"
- "Por eso, yo canto así, así es mi canto: al son de mi tierra, con gusto y con llanto…"
- "Que mi canto a Colombia le llegue, no pido más nada, eso me basta…"
- La Trascendencia de "Quevedo"
- Conclusión
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